El valor del patrimonio y la promoción del turismo cultural
Con un crecimiento anual en torno al 15 por ciento, el turismo cultural representa el 37 por ciento del total del sector, según datos de la Organización Mundial del Turismo. El patrimonio cultural puede ser un importante motor turístico, con grandes oportunidades, pero igualmente no pocos retos. Por un lado, atrae visitantes con una posibilidad de gasto por encima de la media y un nivel educativo superior. Por el contrario, la banalización o la mercantilización de la cultura en destinos turísticos maduros pueden suponer sus principales amenazas.
Recurso para atraer visitantes y riqueza al territorio
En Malvado Group llevamos 6 años desarrollando proyectos en el sector del turismo cultural, y constatando como la valorización del patrimonio es un recurso que puede atraer visitantes y aportar riqueza a los territorios. Difundir y promocionar nuestra historia y patrimonio cultural es una labor esencial para preservar y conservar el legado y tanto ciudadanos, como administraciones públicas, como empresas debemos insistir en ello.
Además, según los datos, no todos los que visitan bienes y recursos culturales son turistas, sino que los propios habitantes de estos lugares con patrimonio destacado son usuarios del mismo. Por ello, es importante adaptar los lugares a las demandas actuales de los usuarios, innovando en la planificación de productos culturales en función de sus perfiles y aprovechando la potencia que ofrece el uso de nuevas tecnologías como la realidad virtual o aumentada para la difusión de esos valores culturales.
Turismo creativo
La historia y la cultura ofrecen inmejorables recursos para potenciar el turismo creativo, conocido como turismo naranja. Diseñar y ofrecer nuevas rutas centradas en la tradición, la etnografía, la literatura, la gastronomía, la música, el folclore, los personajes históricos, la economía, las leyendas, las actividades artesanales, etc., pueden, y deben, ser importantes elementos de atracción, diversificación y desestacionalización de la oferta turística que pueden contribuir a que los destinos reciban nuevos visitantes y de mayor calidad. Para las empresas supone oportunidades de negocio y crecimiento, y para los ciudadanos una mayor implicación con su territorio, al mantener vivas las costumbres, tradiciones e historia social y cultural, en suma, su patrimonio.
Calidad y profesionalidad
Apostar por la calidad es fundamental para evitar esa banalización y mercantilización que señalábamos como principales retos del turismo cultural. En este sentido, recomendamos a los promotores turísticos confiar en empresas que tengan la calidad y la especialización como valores en su trabajo a la hora de tratar contenidos culturales. La experiencia positiva final del usuario depende de que esos contenidos sean acordes al valor patrimonial de los espacios sobre los que se está trabajando. La profesionalidad es fundamental para el tratamiento adecuado y la correcta difusión acorde a las necesidades de conservación de ese patrimonio cultural.
Si vas a desarrollar un proyecto en el campo del turismo cultural ¡llámanos! En Malvado Group ofrecemos asesoramiento personalizado y los mejores productos adaptados a las necesidades de tus usuarios o visitantes.